viernes

And the Oscar goes to...

Voy a perder muchas tardes preguntándome por qué. Por qué has actuado así. Por qué he confiado en ti. Por qué he permitido que me mientas hasta tal punto. Y digo perder porque sé de antemano que no voy a obtener una respuesta sincera, ni tuya, ni mía. Y ahora recuerdo a mi subconsciente, y la razón que tenía. Esa maldita canción de Radiohead que me rallaba hasta el alma, “how can you be sure?” ¿Cómo puedes estar seguro? No podía, claro que no podía. Finalmente todo ha acabado como la canción, “I don't want you anymore”.

Maldito cabrón, ¡cómo has pisoteado mi orgullo! Y yo que pensaba que era hora de tragárselo. Serás hijo de puta. Lo peor es que no puedo parar de pensar ni un solo segundo. Te veo en cada una de las malditas personas que tenemos en común, en cada página que hemos estudiado juntos, te veo en mi puta cama porque se que has estado ahí. Y no creas que lo pienso en plan melancólico, en absoluto. Solo pienso en qué pasaba por tu cabeza cuando hacías todas esas cosas, mirándome a la cara y mintiéndome. Pienso si en algún momento tu conciencia te sacudió un poquito. Casi siempre termino concluyendo que no y eso me mata por dentro.

Mi mente casi siempre tiene mucho que ver en crear a personas que no existen, pero te diré que esta vez casi todo el mérito es tuyo. Enhorabuena, el Óscar al mejor actor principal va para ti. Ya que estamos, mencióname en los agradecimientos de tu discurso, nuestra tragicomedia bien lo ha valido ¿no? ¿Quién sabe? Lo mismo también cae el de mejor guión original.

Yo, sin embargo, soy pésima. Mis 'no os preocupéis' son tan convincentes que traen a mis amigos a casa con una tonelada de chocolate. Pero no puedo hablar, porque tendría que admitir demasiadas cosas. Tendría que admitir que lo voy a echar muchísimo de menos. Al personaje, claro, porque a él no lo conozco. Y que tengo que esforzarme cada segundo del día porque no ver esa imagen en mi cabeza y no tener que poner en 'replay' Hot Fuss (The Killers). Que estoy apretando los dientes con todas mis fuerzas por no llorar de rabia mientras escribo esto.
Pero, ¿qué queréis? En menos de una semana he perdido a mi 'algo especial', mi amigo, mi autoestima y la poca confianza en el ser humano que me quedaba.



Y, por cierto, no ha merecido la pena.

PD: Hoy no hay canción, que no quiero cogerle asco a ninguna.


Mensaje para Clara y para el que no es claro. Parte I.

"No, no me cuentes eso a mí. No te atrevas ni a...Así no es como se trata a un amigo... ¿besándome en la fotocopiadora? ¿de la manita por IKEA? ¿follando en la ducha? ¡Vamos! ¡Amigos mis cojones!"


sábado

¿Cómo puedes estar seguro?

Las murallas no son reversibles, siempre dejan una marca aunque la creas destruída hasta los cimientos. Pero eso no es tu culpa. Mi pasado no es tu culpa, ni mi personalidad, ni mis vaivénes. La culpabilidad, mi vieja amiga. Quizá la culpa sea de esos cigarros sin querer, de las palabras que entrevemos, de esa fuente que es testigo. Tal vez de esas caricias a destiempo, o del perdón que nunca has pronunciado. La culpa es del dejar hacer, del silencio, de mi cama, del "ya lo pensaré mañana". De mi armario, con esa lágrima escrita. La culpa es de esos mosquitos, de esa luz encendida, de ese gesto que ¿solo tiene lugar en tu cabeza. 

Quizá la culpa es mía, y de esa extraña obsesión que tengo por coleccionar piedras en el camino que ahora mismo estas entorpeciéndome, porque quiero y a sabiendas que mi papel en el tuyo se limita a una florecilla en el arcén. 

Tu piel de cordero te ha durado muy poco, y sin embargo, eso no ha hecho más que mejorar tu situación a la vez que me hundía en el fango. A mi nunca me han gustado los corderos. Ni las metáforas, ni las cosas claras, ni las aguas limpias ni la rectitud ni las cosas bien hechas. A mí me gustan las turbulencias, las medias tintas, el caos. 

viernes

El equilibrio es imposible.

"Confía en mi, nunca has soñado poder gritar y te enfureces, es horrible el miedo incontenible. Entonces ven, dame un pedazo, no te conozco cuando dices: qué felices, qué caras más tristes."

El reto mental era demasiado suculento como para dejarlo ir por un poco de sobrevalorada paz interior. La paz interior es una mierda; la belleza está en las curvas, en lo nublado, en el quizás. No me gusta dar las cosas por sentadas y tal vez por eso esté escribiendote esto ahora.  Nunca has sido un seguro de vida, y yo tampoco lo he pretendido. Pero cariño, yo ya no entiendo ni media. Tu mente es lo primero que se me escapa totalmente en mucho tiempo. Porque puedes dar más, y menos; y sin embargo te quedas en un limbo que soy completamente incapaz de interpretar. Y me frustro, y sufro, y me gusta, que es lo peor. El masoquismo emocional se multiplica día tras día, y ojalá llegue a tu conciencia.
 Estoy disfruntando de esto, pero te juro que hay noches en las que quisiera gritar y tirar huevos a tu ventana. Como esta noche, como ayer... porque esta semana es impar y te ha tocado no quererme. 

"Ella sabe y presiente que algo ha cambiado, ¿dónde estás? no te veo, ya lo entiendo, ahora ya no me lamento, no sigo detrás, ¿para qué? Si cada vez que vienes me convences, me abrazas y me hablas de los dos... Y yo siento que no voy, que el equilibrio es imposible cuando vienes y  me hablas de nosotros dos, no te diré que no, yo te sigo porque creo que en el fondo hay algo."

Y porque desmoronas mi altísima dignidad con una facilidad que asusta. Porque no lo entiendo. Porque me quedo sin palabras intentado explicar lo que pasa aquí. "En el fondo hay algo" quizá sea la descripción más acertada. Y qué coño es algo, me pregunto cada noche. No te creas, no lo quiero saber. Una respuesta lo estropearía absolutamente todo. Si es que hay algo que estropear. Aunque por mucho que tus semanas de abstinencia y el mundo en general me hagan pensar que no, se al cien por cien que sí. Qué esas noches no han sido en vano. Que se que dejas caer tu muro casi tan poco como yo, y que ambos lo hemos hecho. Y desnudarte cuando ya lo estás crea una de las mayores intimidades que puede tenerse. Aunque haya que fingir por la mañana, y pretender que volvemos a diciembre.


Ups. Casi me olvido del mensaje principal. Gilipollas.