martes

Despierta, y haz como que nada te afecta.

Patético. Ni siquiera puedes pronunciar su nombre. Ese nombre que te hace llorar por las noches.
Sí, sé que lloras, que lloras mucho. Se que cuándo llegas a casa y te encierras en tu fortaleza de cuatro paredes, o en tus canciones, o en tus películas, o en tus libros tu fingida indiferencia se desmorona hasta la inexistencia.
Se cuales son las palabras que te cuesta decir.
Se cuales son las imágenes que prefieres borrar.
Se cuales son los mensajes que no puedes leer.
Se cuales son los ojos que te niegas a recordar.
¿Crees que puedes esconderte de mí, como lo haces de todos los demás, de toda la realidad? ¿Quién crees que te vigila cuando agotas todos tus frívolos entretenimientos? ¿Quién crees que te hace perder los nervios cuando creíais que todo iba bien?
¿Por qué sabes que nada va bien, verdad? ¿vas a contarme qué hay tras tus buenas maneras? ¿tras tus sonrisas de por las noches? ¿tras el bonito pintalabios rojos? ¿tras todos los vestidos de fiestas? ¿tras todas esas canciones tristes?
¿Qué hay tras los esfuerzos que haces para no llorar cuando hablas? ¿ tras la suave canción que cantas a cada segundo del día?
¿Qué hay tras tus besos con extraños? ¿ tras todo el agua que bebes?
¿Qué hay tras todos los sueños que tienes por las noches?
Yo solo soy tu bonito ángel negro. Me llaman conciencia.